No Dejar Al Tiempo Irse En Silencio

Nunca antes en mi vida había tenido la intención plena de escribir poesía. Aunque desde joven he leído a los poetas mexicanos y latinoamericanos como Pablo Neruda, Jaime Sabines, Amado Nervo, Efraín Huerta, Rosario Castellanos, Sor Juana Inés de la Cruz, José Emilio Pacheco y Octavio Paz, fue hasta estos días de cuarentena en que decidí encontrar al pequeño poeta que todos llevamos dentro y comenzar a explorar en esta forma de escritura, la cual es por decirlo así, muy liberadora de las emociones guardadas. Son veinte poemas y veinte ilustraciones realizados desde el encierro. Cada ...

No desistas todavía no te rindas no abandones no te dejes vencer cuando te ofendan grita fuerte cuando te golpeen no apagues la luz no alimentes con tu sangre el furor de los necios hazles frente escúpeles aráñales esquívales que tu cuerpo sea tu exclusivo templo tu hacienda privada tu rincón de luz protégelo defiéndelo dale placer expulsa al invasor de su dominio no escuches a los cuerdos sé tu propio rey sigue tu propio camino busca sólo en tu interior. Será, frente al poder, tu más grande victoria.

Las penas más profundas del ser pueden arrastrar al hombre a los vicios o, en el peor de los casos, al mundo literario. Es así como nace Poesía de un ebrio, una obra iniciática en la que el autor se inspira y se embriaga de poesía, misma que nace de la monotonía, del amor, el desamor, la muerte y la vida, contenida en cada suceso que llega a vivir un hombre que no hace más que estar ebrio, pero ¿ebrio de qué?

La autora analiza los sonetos más íntimos de Griselda, dónde recrea su pasión por el cuerpo del ser amado; la relación entre Eros y Tánatos, en la que el deseo es una lucha por la vida; donde la poeta enlaza el amor a la vida sexual. La obra de Beatriz Saavedra sobre la poética de Griselda Álvarez que presentamos al público lector, es la interpretación femenina del mundo, desde la estética de la poesía.