Day of the Dead

Mary J. Andrade es una destacada escritora y artista de origen puertorriqueño, nacida en el año 1955 en San Juan, Puerto Rico. Su pasión por la literatura y el arte se manifestó desde temprana edad, lo que la llevó a explorar diversas formas de expresión creativa a lo largo de su vida. Su obra abarca desde la poesía hasta la narrativa, reflejando su amor por la cultura puertorriqueña y su compromiso con la justicia social.

Andrade se graduó de la Universidad de Puerto Rico, donde estudió artes y literatura. Su interés por las raíces culturales y la historia de su país la motivó a investigar y documentar las tradiciones y leyendas de Puerto Rico, lo que más tarde se convertiría en una de las piedras angulares de su obra literaria.

A lo largo de su carrera, Mary J. Andrade ha publicado numerosos libros que han sido bien recibidos tanto por la crítica como por el público. Su primer libro, “Cuentos y leyendas de Puerto Rico”, fue publicado en 1997 y se convirtió en una obra fundamental para comprender la rica tradición oral de la isla. En este libro, Andrade recopila historias que han sido transmitidas de generación en generación, aportando una visión única de la cultura puertorriqueña.

En su obra, Andrade también aborda temas como la identidad, la migración y la lucha por los derechos humanos. Su fluidez en varios idiomas, incluyendo el español y el inglés, le ha permitido a la escritora llegar a un público más amplio, especialmente a aquellos interesados en la literatura latinoamericana contemporánea.

A lo largo de los años, Mary J. Andrade ha recibido varios premios y reconocimientos por su contribución a la literatura. En 2005, fue galardonada con el Premio Literario de la Crítica por su libro “La voz de la tierra”, una colección de relatos que exploran la relación entre los seres humanos y su entorno natural.

Además de su trabajo como escritora, Andrade ha sido activista social, utilizando su voz para abogar por los derechos de las mujeres y las minorías en Puerto Rico y en el extranjero. Su compromiso con el activismo ha sido una fuente de inspiración para muchos, y ha llevado a la autora a participar en conferencias y simposios internacionales.

En los últimos años, Mary J. Andrade ha continuado escribiendo y publicando, así como también ha incursionado en el mundo del arte. Su trabajo artístico ha sido expuesto en diversas galerías y museos, y ha sido elogiado por su originalidad y su capacidad para comunicar mensajes profundos a través de imágenes.

Con una carrera que abarca más de tres décadas, Mary J. Andrade se ha consolidado como una figura emblemática en la literatura y el arte puertorriqueño. Sus escritos no solo enriquecen la literatura contemporánea, sino que también ofrecen una mirada profunda a la complejidad de la identidad puertorriqueña y su lugar en el mundo. Actualmente, Andrade sigue activa en su producción literaria y artística, y permanece como una voz influyente en la defensa de la cultura y los derechos humanos.

Pasos supone el reencuentro con una paradoja: descubrir, a través de imágenes de diversos fotógrafos de Cantabria, algunos de los paisajes de la UC. Lugar extenso y múltiple, casi mágico para quien no lo conozca demasiado. Cualidad contradictoria con su naturaleza, porque lo que ocurre entre sus paredes forma parte del método científico, nada tiene que ver con magia o esoterismo, sino con el estudio minucioso de cada una de las especialidades que configuran la UC, contribuyendo al desarrollo de la sociedad de Cantabria y al avance de la ciencia.

En tanto más pobre, elemental y astroso es un circo, es más poético y expresivo. Los maravillosos cirqueros que dibujó el joven Picasso en su Período Rosa (de una pureza y nitidez que parecen imposibles de alcanzar) y que inspiraron poemas melancólicos de Rilke, no sólo son todos pobres, sino que se mueven en un espacio desolado. Tienen ese aire tristón, indeciso y desamparado de las afueras de una ciudad, aire de límite vacilante, de tierra de nadie. La razón del tono poético nacido de la incuria es que el circo, todo circo, aun los ricos y lujosos, de tres pistas, destilan no sé ...

Este libro presenta una valoración de la fotografía en la España entre guerras (1914-1939), partiendo de documentación original sobre el tema publicada en la prensa fotográfica y cultural de la época.

Complicado entender la vida de uno sin el otro. El Real Madrid abrió sus ojos al mundo de los vivos en 1902, el Atlético, en 1903. Un año no es nada cuando se habla de un siglo de historia y pasión. Se puede y debe decir que desde entonces viven de la mano. Cerca pero lo suficientemente lejos para mantener las distancias. Cada uno, con sus vicisitudes, sus momentos de gloria y sus momentos de pena. Cada uno fiel a una idiosincrasia que ha ido forjando a su manera, sin mirar mucho al de enfrente, pero sin perderle nunca de vista.