Reactivar el sentido común

Poner a los científicos en contra de un «público dispuesto a creer lo que sea», al que hay que mantener a distancia, es un desastre político. "Los que saben" se convierten en los pastores de un rebaño entendido como necesariamente irracional. Una parte de ese rebaño parece hoy, en efecto, haber perdido el sentido común. Pero ¿no es porque ha sido humillado, empujado a hacer causa común con lo que más enloquece a sus pastores? Y los otros, los indóciles y rebeldes que se activan para hacer germinar otros mundos posibles, son tratados como enemigos. Si la ciencia es una "aventura"...


























































