Doña Bárbara
En la parte más desierta y bravía del cajón del Arauca estaba situado el hato de Altamira, primitivamente unas doscientas leguas de sabanas feraces que alimentaban la hacienda más numerosa que por aquellas soledades pacía y donde se encontraban uno de los más ricos garceros de la región. Pues esta es la historia que se cuenta en Doña Bárbara: la del hato Altamira, el más grande del Cajón del Arauca, herencia de los hermanos José y Panchita Luzardo [] Este agujero negro del monte, ciénaga irresoluble en las letras de un documento, es también una suerte de Aleph de la llanura...